El viernes 19 de diciembre, tuvo expresiones de consuelo para la familia y los voluntarios, así como para los Oficiales Generales del CBS.
Desde que se supo de la muerte del voluntario activo y Ayudante 1° de la 6ª Compañía “Salvadores y Guardia de Propiedad”, Paul Valenzuela Muñoz, La Moneda se mostró preocupada por lo ocurrido y el Presidente de la República, Gabriel Boric Font, hizo espacio en su agenda como Jefe de Estado para concurrir al cuartel de Avenida Ejército N° 212, donde lo esperaban sus dos familias: su esposa, madre e hijos y los compañeros “sextinos”.
Con el dolor vivo, a menos de 24 horas de la pérdida fatal, la “Sexta”, a las órdenes del Capitán, Juan Padilla Amaro, formó en la avenida para rendir honores al Mandatario, quien estaba junto al Subsecretario del Interior, Víctor Ramos, y el Delegado Presidencial Metropolitano, Gonzalo Durán. Allí fueron recibidos por el Superintendente del Cuerpo de Bomberos de Santiago (CBS), Gabriel Huerta Torres; los integrantes del Consejo de Oficiales Generales de la Institución; miembros del Directorio; el Director, Mario Fernández Batuone, y el presidente de la Junta Nacional de Cuerpos de Bomberos, Juan Carlos Field Bravo.
“Quiero que sepan que el haber decretado duelo hoy día no es un mero acto administrativo, sino que cuando alguien se pregunte por qué la bandera está a media asta va a saber que es por Paul y por ustedes… Los admiro profundamente y les agradezco a ustedes y sus familias por la valentía y la resiliencia y todo lo que hacen día a día”.
No fue solo un saludo el que entregó el Presidente Boric, sino que también dedicó abrazos o apretón de manos a todos los voluntarios de la “Sexta” que se acercaban hasta ir al segundo piso del cuartel para ingresar al velatorio instalado en el salón de sesiones de la Compañía. Allí se ubicaba el ataúd con los restos del Mártir y, en sillas colocadas a los costados su madre, Ana, que una hora antes había recuperado el cuerpo de su hijo desde el Servicio Médico Legal; y Matías, de 15 años, el hijo mayor de Paul.
En esos momentos, con presencia del Superintendente; el Secretario General, Jerónimo Carcelén Pacheco; el Director, Mario Fernández, el Jefe de Estado juntó sus manos con doña Ana y se arrodillo ante ella para transmitir su mensaje. Lo propio hizo con Matías, momentos en que ambos unieron sus cabezas en sentida comunión y consuelo.
Acto seguido, solicitó formar la Guardia de Honor que rodea la urna mortuoria junto al Superintendente, el Delegado Presidencial y el Subsecretario del Interior.
Después de despedirse de la familia, el Presidente sentó en el mesón de la testera de la Compañía donde se ubicaba el libro de condolencias, ocasión en la que dejó un especial mensaje a los voluntarios de la 6ª Compañía “Salvadores y Guardia de Propiedad”.
Finalmente, tras saludar a Oficiales Generales, miembros del Directorio, Oficiales y voluntarios de la “Sexta”, dejó el Cuartel.





