El “quintino” Eduardo Guerra Kappés cuenta con 77 años en la Institución.
Al cumplir 77 años de servicios, el Cuerpo de Bomberos de Santiago (CBS) saludó al Miembro Honorario de la Institución, Voluntario Honorario de la 5ª Compañía “Arturo Prat” Eduardo Guerra Kappés, Primera Antigüedad de la Institución.
El Voluntario, que ingresó a las filas de la “Quinta” el 3 de mayo de 1948, es nieto de Luis Kappés Guibert, quien fuera Superintendente y Voluntario de la 3ª Compañía “José Luis Claro Cruz”.
Con sus 77 años en el Cuerpo de Bomberos de Santiago y con dos de sus nietos en las filas en la 5ª Compañía, el Voluntario Honorario fue testigo del incendio y derrumbe en el que, el miércoles 20 de agosto de 1952, falleció el Comandante Mártir, Máximo Humbser Zumarán, lo que relata en una entrevista que reproduce el CBS:
“Yo estaba trabajando en el primer piso y dos Max (el Comandante, Máximo Humbser) pasó por ahí y me dijo: ‘Esa pieza que hay ahí me preocupa, así que tú con tu pitón ándate para allá y te pones ahí’… En eso estaba cuando sentí un crujido y me di cuenta de que era el edificio y salté para atrás. Y cuando salté para atrás mi casco fue a parar adelante… Empecé a ver cosas que caían y ahí cayó don Max, él y un ayudante de él, que tuvo la suerte que no le cayó nada pesado y quedó con problemas, pero nada serio… pero don Max, no, don Max quedó ahí…”.
“Entonces, cuando empezaron a sacar cosas, lo primero que salió fue el casco mío, porque yo arranqué hasta la calle porque salió una nube de polvo negro, no sé. Y cuando volví, pasado el susto, me encontré con una serie de amigos míos rezando por mí, porque encontraron el caso, pero no a mí. Y seguían buscando entre los escombros, uno de ellos (de los que escarbaban) era Enrique Matta Rogers, mi gran amigo, el mejor amigo que yo tuve en mi vida, y que me ve… estaba sentado rezando porque pensaba que yo tenía que estar ahí (entre los escombros) y me dio un abrazo. Esa es la historia relacionada conmigo y con don Max”.
Consultado sobre la dureza emocional del momento vivido hace casi 73 años al ver caer al Comandante, dijo: “Claro que fue, yo estuve cuando lo sacaron ya fallecido, tuvo muy mala suerte. Y el Ayudante de él estaba al lado… bueno, así es la vida”.
El relato del Voluntario Honorario y Primera Antigüedad del CBS emociona, aunque hayan transcurrido más de 72 años del martirologio del Comandante de la Institución, Máximo Humbser Zumarán.
